No entiendo las cuatro estaciones



Las cuatro estaciones…
Verano… otoño… invierno… primavera…
Tres meses cada una…
El sol… las hojas… la nieve… las flores….

Así me las enseñaron a mí… con Vivaldi agasajándolas de fondo. Lo cierto es que no es cierto… o ciertamente no lo sé. No estoy segura de su absoluta inexistencia, pero tampoco el calendario parece darles entidad.



Como todo en la naturaleza está pautado, pero es flexible, son ciclos, y a ese movimiento le asoma la irregularidad y devienen en imprevisibles efectos con resultados aparentemente aleatorios, pero seguramente explicables.

Individualmente, cada una de ellas presenta ciertas características complejas de asimilar... para no extenderme demasiado, recuerdo  cuestiones que no entiendo de cada una de ellas y en los siguientes links ya las hemos problematizado de manera independiente;

¿Será que todavía existen las cuatro estaciones?
Estoy casi segura, sin ninguna prueba, que el sol sigue viendo a la Tierra dibujar elipses a su alrededor, y eso, como hace rato, debería seguir generando las cuatro estaciones.
Sin embargo, atmósfera adentro, los inquilinos del planeta azul estuvimos haciendo algunas travesuras poco prudentes que podrían indicar que el clima ya no sea tal cual lo repetíamos en aquellos versitos de la escuela primaria.

No siento que coincidan con el calendario, ya no existe el momento de guardar la ropa que no vamos a necesitar por un par de meses, no es tan riguroso el invierno, es bastante más inclemente el verano, siento a destiempo la floración de la primavera y le falta fresco a casi todo el otoño... no logro identificar con claridad las etapas, creo que eso me tiene confundida, o contrariada.

No entiendo las cuatro estaciones, su potencial vigencia, o su inminente desaparición... sus motivos planetarios de existir y sus razones antropocéntricas de desaparecer... no entiendo, pero celebro los cambios, cuando sean.


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